jueves, 6 de febrero de 2014

Para que no arañen tus muebles, trucos #paratugato


Cómo enseñar a un gato a no arañar los muebles

El gato es un animal difícil de adiestrar. A diferencia del perro, que en estado natural vive en jaurías en las que hay orden y jerarquía, el gato en estado salvaje es un cazador solitario lo que se traduce en estado doméstico en una mascota que no va a hacer ningún esfuerzo por adaptarse al grupo y que aprenderá lo que le interese. Un gato con uñas siempre arañará: para el gato es una conducta innata e instintiva de ejercicio, higiene y mantenimiento de sus armas de caza y defensa. Además es una forma de marcar su territorio ya que al rascar sus dedos desprenden una marca de olor que los humanos no percibimos pero que para él y los otros gatos es inconfundible. Por lo tanto el gato tiene que arañar, lo que podemos conseguir es que el gato arañe donde nosotros queremos y no arañe el sofá o los muebles.


  1. Es estado salvaje el gato suele arañar los troncos de los árboles, debemos comprar un rascador que se parezca lo máximo posible al tronco de un árbol no en su apariencia mas si en su funcionalidad: Grande y sobretodo estable. Un gato nunca se acostumbrará a rascar en un rascador poco estable que se mueva cuando lo use. Este tipo de rascador es la mejor inversión ya que lo que gastemos en rascador lo ahorraremos en sofás, muebles o alfombras.
  2. Para atraerlo hacia el rascador puedes usar juguetes, golosinas, caricias…si es un gato que disfruta del cepillado, cepíllalo cerca del rascador para que se convierta en un lugar agradable para él, además de ello todos los pompones de DGG PETS tienen hierba gatera que garantizan que el gato menos curioso se acercará.
  3. El gato araña siempre en el mismo lugar: son animales de costumbres y además la misma marca olorosa que han dejado les atrae a arañar al mismo lugar. Este circulo vicioso es muy difícil de romper en un gato adulto. 
    Pon el rascador en el lugar que el gato ha empezado a rascar y aléjalo muy poco a poco, medio metro cada día más o menos.
  4. Siempre que el gato empiece a arañar en el lugar indeseado rocíale con un spray con agua (o cualquier cosa que no le guste) sin que el gato te vea. El objetivo es que el gato relacione el rascado en el lugar prohibido con un resultado desagradable por eso es muy importante que el gato no vea que eres tu el que le rocía ya que entonces relacionará el rociado contigo y rascará en ese lugar cuando tu no estés.
  5. Lo mejor de todo es que tienes a la mano a unos especialistas en gatos, cualquier duda escríbenos y por tu pedido recuerda que es la mejor inversión, mejor aún cuando te garantizamos un producto 100% renovable que podrás tener por años.

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